Tengo 67 años, soy chillanense, hijo de inmigrantes catalanes, ingeniero civil industrial, chillanense. He laborado en el sector público y privado y en este último sector, y en buena parte de mi vida, fui empresario pyme del sector comercio, compartiendo laboral con mi compromiso con actividades de interés social, centro de padres y clubes deportivos. Ya más libre de obligaciones laborales, me he involucrado en cuestiones más políticas: por una Asamblea Constituyente, convencido que buena parte de los problemas del país tienen su origen en la carta magna, en No + AFP, para tener un verdadero sistema de Seguridad Social y en la Red Laical, fruto de la indignación por los abusos cometidos en la Iglesia Católica y además he sido panelista radial sobre contingencia política, con el afán de repolitizar a la ciudadanía.
Mis vivencias como hijo de inmigrantes, padre de tres hijas, las dificultades del empresariado pyme y el pertenecer hoy a la “tercera edad”, me comprometen con las problemáticas de las que no muchos hablan: Inmigración, segregación por género, abuso a la tercera edad y con las asimetrías inaceptables que sufre el empresario pyme. Hoy se nos abre una oportunidad histórica y única para construir el techo de la Casa Común para que la dignidad se haga carne en cada habitante de este país, independiente de su origen social y de procedencia, de su género o capacidad económica. Ese techo los construiremos entre todos y todas
